

Circuito Cultural
Centro Cultural Nave
Edificio de inicios del S.XX restaurado y remodelado en 2015 con la finalidad de convertirse en un centro cultural de categoría internacional para la creación, experimentación e investigación de las “artes vivas” que tengan como eje principal el movimiento. Destaca en su diseño la dimensión y calidad de sus salas, cuyo propósito final es dar cabida a la obra como protagonista. Inmueble de Conservación Histórica en Zona Típica. Libertad #410.
Nave es un centro cultural de categoría internacional. Es definido como un centro de creación, experimentación e investigación de las artes vivas que interactúan entre sí, desde el movimiento como eje principal, en disciplinas tales como el teatro, la danza y la música, buscando facilitar el trabajo creativo y su expansión. Entienden el arte y patrimonio como fuente de experimentación, conocimiento y reflexión, por lo cual creen necesario su valoración y transmisión en la sociedad.
Obra del empresario Rodrigo Peón-Veiga Herranz, aportó millonarios recursos para habilitar un viejo edificio del barrio Yungay a fin de convertir en uno de los centros de actividad artística más importantes de Chile, tomando como inspiración en concepto y diseño al Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), que el empresario trasandino Eduardo Constantini implementó en dicho recinto.
En 2009, Peón-Veiga busca una propiedad en el barrio Yungay, adquiriendo una residencial del empresario Olaf Ortúzar, la familia Achurra y la Universidad Católica, construida a principios del siglo XX de estilo neoclásico cuya superficie de 1.400 metros cuadrados se encuentra ubicada en la esquina de las Compañía con Libertad, donde anteriormente sufrió una serie de incendios sospechosos que terminaron con la expulsión de sus ocupantes en el año 2010.
Su proceso de rehabilitación, a cargo del arquitecto Smilijan Radic con un proyecto acogido a la Ley de Donaciones Culturales, recuperó su fachada principal e implementó en sus interiores una sala contemporánea, con 750 metros cuadrados de azotea habitable y una carpa permanente, los espacios “caja negra” para 600 personas de pie y gradería retráctil con 146 butacas y “cubo blanco”, para 60 personas y una sala de ensayo. Tardó más de cinco años con un costo de 2,5 millones de dólares.
Junto a las instalaciones artísticas, el edificio alberga a la Fundación Patrimonio Creativo, que administra y preside la esposa de Peón Veiga, María Teresa Petric.
Está protegido como Inmueble de Conservación Histórica.
